ERUVIEL ÁVILA VILLEGAS, EJEMPLO DEL CLÁSICO POLÍTICO DEMAGOGO

Pergentino Cortés Girón

Dirigente estatal del Movimiento Antorchista en Sinaloa

No cabe duda que la inmensa mayoría de nuestros políticos y gobernantes mexicanos no han aprendido nada del acontecer nacional de las últimas décadas, en las que la ciudadanía se ha vuelto más crítica y exigente en torno a la actuación de los gobiernos en su relación con los ciudadanos, misma que tiene que traducirse en políticas públicas - como ellos mismos dicen- que garanticen a todos los mexicanos los derechos tutelados en nuestra Carta Magna. Muy por el contrario, siguen actuando al viejo y amañado estilo priista del siglo pasado, dicen una cosa cuando andan en campaña, asumen una actitud tan dócil ante los ciudadanos a quienes piden el voto y son capaces hasta de besarles los pies y, otra cuando adquieren el cargo. Este tipo de políticos creen que la ciudadanía padece de amnesia, igual que ellos. Nada más lejos de la realidad. El pueblo, para bien de la nación, se ha vuelto más crítico y exigente ante los gobiernos, ya no está dispuesto a dejar pasar los agravios, las desatenciones y los ninguneos de sus gobernantes, esa es la realidad.

Lo anterior viene a cuento por la actitud represiva que ha venido asumiendo el Dr. Eruviel Ávila Villegas, Gobernador del Estado de México, ante la exigencia de miles de mexiquenses agrupados en el Movimiento Antorchista, quienes sólo le piden que cumpla los compromisos de obras y acciones que públicamente se comprometió ante ellos y ante Notario Público. Nada más, pero nada menos.

Por respuesta “institucional”, colonos, campesinos y estudiantes humildes del Estado de Mexico, han recibido, junto con sus dirigentes, una tupida campaña de insultos, calumnias y agresiones que han cobrado ya varias vidas. Esto es inaudito en un régimen “democrático” como el que se dice que vivimos, pues los manifestantes, insisto, sólo piden que se atiendan sus necesidades más elementales de vivienda, salud, educación y otros servicios y que además, se ponga un alto al cacicazgo más feroz del transporte en ese 

estado, me refiero al que representa el Sr. Axel García Aguilera, quien al amparo del poder público y bajo la protección de los gobiernos estatales en turno, ha amasado una inmensa fortuna que seguramente comparte con altos funcionarios del gobierno mexiquense, pues solamente así se explica que estos le toleren toda una serie de violaciones a la Ley y que además mantenga a todos sus trabajadores en una explotación rapaz digna de los tiempos del Porfiriato; a este tipo de “empresario” protege el gobierno del Dr. Eruviel Ávila. El cacicazgo de Axel data desde los años 70 del siglo pasado, me consta porque tuve la oportunidad, en mis años de estudiante de agronomía en la FES Cuautitlán de la UNAM, por donde prestan el servicio las líneas de transporte de este cacique, que desde entonces, ha actuado como señor de horca y cuchillo, nulificando a sus competidores a sangre y fuego. El Dr. Eruviel, además de la protección que le brinda a este cacique, la ha emprendido en contra de dos ayuntamientos legalmente constituidos y que son presididos por alcaldes de filiación antorchista. Me refiero a los ayuntamientos de Chimalhuacán e Ixtapaluca, que han sido objeto de represión administrativa, física y política, se les niegan los recursos económicos a los que legalmente tienen derecho, se han orquestado campañas de intimidación y desprestigio, utilizando a mercenarios de la política y porros a sueldo. El señor gobernador, descaradamente está usando recursos públicos para reprimir abiertamente a una de las organizaciones sociales más honestas que aglutina a miles de mexicanos, que lo único que persiguen es acceder a mejores niveles de vida. Así paga este gobernante sin escrúpulos el enorme apoyo que le brindó el Movimiento Antorchista en su campaña, quienes le aportaron miles de votos para su triunfo electoral.

Ahora bien, aquí cabe preguntarse si el Dr. Eruviel está actuando por motu proprio, o bien está siendo alentado y protegido por políticos encumbrados en altos niveles del gobierno federal, que buscan, a través de la mano eruvielista, aniquilar al Movimiento Antorchista Nacional, que hoy por hoy, es una de las organizaciones sociales más importantes del país, que ha ido ganando la confianza de grandes masas de mexicanos que ven en él, la única esperanza del mejoramiento de su nivel de vida. Esa es la gran interrogante que seguramente hemos de comprobar muy pronto, pues el nivel de represión al que está llegando el señor gobernador, exige ya la intervención del Presidente de la República, Lic. Enrique Peña Nieto, quien debe conminar al Dr. Eruviel Ávila a que deponga su actitud y busque acuerdos con los antorchistas para cumplir los compromisos que él mismo asumió. 

Los más cercanos colaboradores del Presidente, deberían aconsejarle que actué de manera rápida, ya que, a como están las cosas en el país, lo que menos se recomienda es echarle más leña al fuego, máxime que los niveles de pobreza en el país, según los últimos datos del CONEVAL, se han incrementado y en general los tres niveles de gobierno se están viendo incapaces para generar crecimiento económico, empleo y buenos salarios, por tanto, cualquier brote de inconformidad social, venga de donde venga, puede ser la chispa que 

incendie la llama. La actitud del gobernador mexiquense no está ayudando a la tranquilidad social del país, este señor, como dice el pueblo, simplemente no le está midiendo el agua a los camotes. Antorcha no es Elba Esther Gordillo, Antorcha no es el SME, Antorcha no es la CNTE (con todo el respeto que se merecen esas agrupaciones), Antorcha es el pueblo organizado, y está preparado para dar una respuesta legal y política, tal como las circunstancias lo exijan. Que nadie se engañe, estamos por la solución institucional de los problemas y haremos uso pleno de nuestros derechos constitucionales, las veces que sean necesarias, nada nos detendrá a buscar las respuestas satisfactorias a las necesidades de nuestros compañeros mexiquenses, todos los antorchistas del país estamos atentosal llamado que nos haga nuestra Dirección Nacional, para defender como dice nuestra consigna, como un solo hombre, a nuestros queridos compañeros del Estado de México.